Aqui les va el otro cuadrito, "levedad".
Espero que los disfruten.

Asi como les regale algunos escritos de mi hijo, les ragalo ahora unas pinturitas de mi hija karlita, una es la que la familia por unanimidad la llamo " el poto", por razones obvias, y la otra es una pintura que me regalo y que yo la intitule "la levedad".Ahora esta mas dedicada a la artesania y a sus clases, yo la considero una buena artista y artesana, puede que la recomendacion sea muy cercana.

Les regalo un poema escrito por mi hijo en un momento de rabia con su polola, como veran o podran leer estaba con un "poquito" de rabia.

Me duele oir tus palabras soverbias,
me duele ver mi reacción en los momentos.
Me duele tener que enfrentarme a la mujer de siempre,
a la que me recuerda mis errores, al espejo de mi muerte.

El dia me mira con lastima
la tierra se rie de mis pasos enanos.
El viento que me traia tus noticias ahora no sopla,
y la lluvia que me recordaba a ti, ahora solo cae en el seco pavimento.

Quiero desaparecer un tiempo de tu vista,
de tu precencia acusadora de mis actos cobardes.
Quiero desaparecer por un momento del dia
por un momento de las miradas incredulas.

Me duele no saber nada,
me duele saber mucho de lo poco.
Me duele no poder aceptar
tu mirada, tu acuasadora voz.

La ultima vez que escribi estaba preparando el viaje para ir a buscar a karlita al aeropuerto, por su llegada desde italia, ella llego bien un poquito mas gordita y eso se entiende por todo los fideos que alla comen, el problema no fue que llegara si no que el como nos movilizabamos en santiago, muy a pesar nuestro nos dimos cuenta que esa ciudad no tiene nada de amable con los provincianos, permitanme entrar en esa categoria, un sistema de locomocion que bien conocen ustedes pero nadie mas, si no tienes la famosa tarjetita no te puedes movilizar en nada mas que en metro y ese es otro show ya que si quiero llegar a la cisterna desde plaza italia debo hacer unos transbordos que te los encargo, un boton de muestra, nos vajamos en vicente valdes para ir a la cisterna, nos dimos tres vueltas antes que el mismo guardia que las dos veces anteriores nos diera indicaciones nos informara correctamente que no debiamos subir o bajar, ya no me acuerdo bien, toda la escalera si no quedarnos en el anden del medio para tomar a vicuña makena y de hay tomar para la cisterna, no me parece muy gracioso, no saben cuanto extrañe este pueblucho.
En fin, pobre de ustedes que tienen que vivirlo todos los dias, no como aca que en cinco o diez minuto se esta en la casa para almorzar desde cualquier parte del centro de valdivia, bueno, no queda otra mas que rezar por ustedes y que lleguen temprano a sus casas.